De las náuseas a Roma...

Por culpa de unas malditas e incómodas náuseas, ayer me perdí un buen plan de sábado: cine, cena y copas. Finalmente, me tuve que quedar en casa, sintiendo un asco generalizado por todo, con dolor de cabeza y fiebre. ¡Bonito fin de semana!

De todas formas, me consuela que haya sido ahora y no el próximo fin de semana. ¿Por qué? Porque lo más probable es que esté paseando por Roma y disfrutando de otro de mis sueños pendientes. Si nada se tuerce en el camino, ya estaré contando mis aventuras del viaje. Lo que no sé es si lo haré desde Roma o al regresar. Dependerá de las ganas que tenga de "conectarme".

Y hoy, domingo, que llevo despierto desde las 5 de la madrugada -normal, teniendo en cuenta que ayer dormí 16 horas o algo así- tendré un día tranquilo, sin mucho ajetreo, para preparar una semana intensa de trabajo antes de emprender el vuelo.